Recetas de pollo a la miel y mostaza hay miles en internet, pero desde mi punto de vista, son innecesariamente complicadas y además la mayoría hechas en cazuela, que siempre hace más difícil hacer una cantidad grande.
Esta es la receta que hago hace años, se hace al horno y puedes hacer fácilmente cantidades ingentes cuando tienes gente a comer. Además de fácil, es una receta barata y rápida. Puedes dejarlo hecho y calentar al horno 10 minutos antes de servir.
Queda muy bien usando el pollo entero, pero si tienes invitados, es casi mejor usar cuartos de pollo o muslitos, que son más fáciles de servir.
Para acompañar va muy bien un arroz basmati, pasado por la sartén con puerro sofrito.
Con este pollo servido con el arroz y una ensalada de hojas verdes variadas o de escarola de primero, tienes una comida de lujo en tiempo record.
Esta es la típica receta sin medidas, así que todo un poco a ojo...
Pollo a la miel y mostaza
Raciones: para 4, pero si sois más o menos, multiplica o divide
Dificultad: solo tener cuidado de no pasarlo en el horno
Tiempo: depende de la cantidad de pollo que hagas
Ingredientes:
Pollo: Si es entero, 1 cada 4-5 comensales.
Si son cuartos de pollo, 4 uds. Uno por persona.
Si son muslitos, como mínimo 8. Dos por persona. En todos los casos el pollo con piel.
Marinada:
La proporción siempre es la misma:
1/3 de mostaza a la antigua (en grano)
1/3 de mostaza de Dijon (la típica francesa amarilla)
1/3 de miel
Para 4 unos 150 g de cada aproximadamente.
Acompañamiento:
200 g de arroz basmati
1/2 puerro
Aceite de oliva y sal
Procedimiento:
Precalienta el horno a 180 ºC
Sala el pollo
Mezcla las mostazas con la miel y embadurna el pollo con la mezcla. Dale un buen masaje!. Hazlo con las manos y ya te las lavarás luego 😉
Pon el pollo en una bandeja de horno y mételo en el horno.
Si haces un pollo entero, pon primero la pechuga tocando la bandeja. Si lo haces en cuartos, pon primero el lado de la piel tocando la bandeja. Si son muslos, da igual.
Cuando esté dorado, dale la vuelta y deja que se dore por el otro lado. Tiene que quedar dorado, si se empieza a quemar, ponle un trozo de papel de aluminio por encima. Estará listo cuando este dorado o la carne se desprenda un poco en la punta del muslo. Si tarda en dorarse y ya se está desprendiendo la carne en la punta de los muslos, sube la temperatura del horno.
Cuando le des la vuelta, rocíalo con la salsa que se forma en el fondo de la bandeja.
Acompañamiento:
Cuece el arroz basmati en agua con sal un par de minutos menos de lo que pone en las instrucciones del envase. Normalmente con unos 10 minutos es suficiente.
Mientras se cuece el arroz, corta el puerro en juliana fina y sofríelo en una sartén con aceite de oliva a fuego bajo. Cuidado que el puerro se quema en seguida! No pongas poco aceite o lo quemarás.
Cuando el arroz esté cocido, cuélalo y añádelo a la sartén con el puerro. Dale una vuelta y pruébalo. Si está el arroz está un poco crudo, déjalo en la sartén a temperatura baja hasta que esté cocido.
Para servir:
Pon el pollo en una fuente y salsealo con la salsa que se ha formado en el fondo de la bandeja del horno, pero que no nade en salsa, solo un poco.
El resto de la salsa, ponla en una salsera o en un bol, para el que quiera más.
Sirve un poco de arroz con puerro en cada plato, una ración de pollo y añade un poco de salsa por encima del pollo, pero no del arroz.
Notas y trucos:
Si quieres hacer plato único haz más arroz por persona.
Si tu pollo es muy grande y igual te falta marinada y el pollo no te queda bien cubierto haces un poco más, que es fácil. Irás cogiendo la medida sin problemas. Si te sobra marinada, a un tarro de cristal y a la nevera, que no se estropea.
Normalmente no hace falta reducir la salsa, pero si la ves muy líquida, ponla en un cazo y redúcela a temperatura baja-media. Cuidado no se te queme.
Si tienes invitados, prepara el pollo y el arroz con antelación y 15-20 minutos antes de servirlos, calientas el horno y metes el pollo dentro. Cuidado no se te queme al calentarlo! Si está muy dorado, tápalo con papel de aluminio. Pon el arroz con puerro en un bol y calientalo al microondas o ponlo en una sartén y calienta a temperatura alta, dandole vueltas para que no se te pegue.